4 de octubre de 2023

Mi historia

 

Leí “Mi Historia” de Michelle Obama, sigo sin acostumbrarme a que las mujeres, en algunos países, pierdan su apellido para pasar al apellido de su hombre y nosotras tan tercermundistas eliminamos el “de” hace cuanto tiempo. Pero bueno, me leí el libro, sin la certeza de si en realidad lo escribió ella, puede ser, es una mujer muy preparada, el caso es que entre sus páginas pude ver a grosso modo algo de la realidad de la cultura norte americana, esa realidad que no ven los que persiguen el Sueño Americano, esa tan diferente a la que vemos en las películas, porque si de Colombia en cine solo se ven casuchas y traficantes, de USA solo vemos lujo y rubias despampanantes.

 

Pero al acercarnos un poco conocemos realidades diferentes, aquí nos quejamos por las filas para conseguir una cita o reclamar un medicamento, pero allá, el porcentaje de personas con acceso a un servicio médico es aterrador y lo que cubre ese servicio es lamentable. 

 

Y hablando de racismo, alguien me vio leyendo el libro y me dijo con ironía – pero esa gente (los Obama) están muy por encima del bien y del mal – Basta con leer un poco para entender todos los inconvenientes que debe superar una mujer negra en USA, porque el tema no es solo de raza, también el género es una traba en ese país tan avanzado. Y aquí recuerdo algo que contaba Barack Obama en un podcast, que alguna vez cuando era estudiante de Harvard, pasó cerca de un carro estacionado que tenía a una pareja dentro y escuchó como al verlo, activaron desde dentro los seguros de las puertas, solo por ser un hombre negro caminando en la noche.

 

En resumen, abriendo la ventanita de un libro para aprender de una sociedad, me pasa lo mismo que cuando viajo. Admiro la belleza y las bondades de otros lugares, pero agradezco también los avances y comodidades de nuestra tierrita.